En el espectro de las celebraciones religiosas dentro del rito católico, la primera comunión figura como un evento de profunda relevancia espiritual y social. Central a esta ceremonia, además de la vestimenta blanca y las oraciones, es un objeto menos discutido pero igualmente significativo: el cordón con cruz para comunión. Esta pieza, que suele pasar desapercibida ante los ojos de muchos, carga con un simbolismo vital y una tradición que merece ser observada con mayor detenimiento. ...